Imagina este escenario:
Una persona que tiene una hipoteca y le quedan por pagar 80.000 euros con un tipo de interés actual del 4,00%. Es una persona con un trabajo estable y sin problemas económicos. No tiene más deudas. Y ahora que tiene la hipoteca bajo control le surge la eterna duda:
- Dedicar los ahorros a realizar pagos extras de la hipoteca para acabar con ella lo antes posible.
- Invertir los ahorros buscando una rentabilidad mayor que lo paga por la hipoteca para ganar un extra.
Esta es una cuestión muy extendida en el mundo de las finanzas personales. ¿Acabar con todas las deudas lo antes posible o buscar una inversión más rentable?¿Por qué verás que unas personas aconsejan una cosa y otros la otra? Total, es un tema financiero…¿o tal vez no?
Filosofías de Finanzas Personales Diferentes
El gran problema es que existen diversas maneras filosofías sobre las finanzas personales un tanto diferentes.
En muchos sitios de finanzas personales o libros verás que se suelen decantar por una de las dos, e incluso por una tercera filosofía. Digamos entonces que existen 3 filosofías sobre las deudas dentro de las finanzas personales. Y son:
Filosofía “Toda la deuda es mala“
La idea detrás de esto es que la deuda significa que te conviertes en un esclavo del dinero de otra persona o entidad.
Esta filosofía de eliminar las deudas lo antes posible, me parece bien en algunos casos, pero con cuidado, ya que te puede dejar muy vulnerable si lo haces sin preparación previa. Por ejemplo sin antes haber creado un pequeño fondo de emergencia para cubrir imprevistos.
Filosofía “La única deuda mala es la que tiene un alto tipo de interés“
Como las tarjetas de crédito o la de créditos personales o minicréditos.
Económicamente hablando, es la filosofía más correcta. Si tienes una deuda de bajo tipo de interés y encuentras una inversión más rentable, lo mejor es invertir los ahorros y no hacer pagos extra para acabar antes con las deudas.
También si la deuda está controlada y es de bajo tipo de interés, puedes dedicar tus ahorros a crear un gran fondo de emergencia que te dure muchos años y a ahorrar para compras caras, como un coche, y pagarlo sin necesidad de endeudarse. Así tienes más seguridad en el futuro, aunque no te enfoques en pagar tu deuda.
Filosofía “La deuda puede ayudarte a mejorar tus finanzas“
Esta es la filosofía general de gente como Robert Kiyosaki, el autor de “Padre Rico, Padre Pobre”.
Él utiliza la deuda continuamente para invertir en algo que le aporte más rentabilidad y así sacar un extra de dinero. Robert lo suele hacer con inmuebles. Es una filosofía muy parecida a la segunda pero mucho más radical. Se requiere de mucho sentido para los negocios y las inversiones y una planificación muy cuidadosa.
¿Cuál es la Correcta?
Sinceramente, no puedo decirlo. No estoy a favor o contra de ninguna de las opciones que he comentado antes porque creo que depende de la persona. De su situación laboral, de su situación financiero, de su aversión al riesgo, de sus conocimientos, etc.
Personalmente, son fan de un fondo de emergencias grande y eliminar las deudas lo antes posible. Es más, evito endeudarme siempre. Pero puedo ver la lógica detrás de otras maneras de pensar y puedo entender fácilmente por qué puedes preferir otra forma de hacer las cosas.
Todas estas filosofías tienen ventajas y desventajas claras. No cometes una elección errónea por elegir una u otra. Siempre que hayas pasado un tiempo analizándolas y averiguando lo que de verdad funciona para ti.
Algunas personas ofrecen argumentos muy convincentes a favor de una de ellas. Pero a menudo se basan en centrase en un atributo particular de esa filosofía, obviando otros.
Por ejemplo, la filosofía de eliminar toda deuda posible, se centra en la sensación de seguridad por no tener deudas pero ¿qué seguridad hay si ocurre un gasto imprevisto de cierta magnitud y no tienes un fondo de emergencia adecuado para hacerle frente?
O la filosofía de Robert Kiyosaki, que se centra en los enormes beneficios que puedes conseguir pero ¿qué hay de las pérdidas económicas de las personas que no consiguen tener éxito?
Escucha a tu corazón. Tu mente puede no saber todas las respuestas pero tu corazón suele apuntar hacia la filosofía que sea más adecuada para ti.
Recuerda, el objetivo de todos estos planes es asegurarte de que estás en una mejor situación financiera en el futuro, de la que estás hoy.
¿Qué filosofía te gusta más?