A mucha gente le ocurre que odia su trabajo. No le gusta lo que hace día a día pero desgraciadamente no puede renunciar a él. Necesita el dinero para pagar las facturas y mantener la misma calidad de vida.
Así que todos los días va a trabajar y cuando llega a casa esta muy cansado psicológicamente sobre todo y lo único que quiere es tirarse en el sofá, ver la televisión y que le dejen en paz.
Esta es la experiencia real de mucha gente. Están atados a un trabajo con el que no están contentos, por razones financieras, ya que dejarlo y pasar a una situación laboral sería un desastre financiero.
Está demostrado una y otra vez que el estrés laboral es perjudicial para la calidad de vida y también para la salud de diversas maneras, sin embargo, muchas personas trabajan en empleos que los hacen miserables a fin de ganar unos pocos euros más.
Se ponen en una situación financiera en la que tienen que hacer una cierta cantidad de dinero cada mes para mantener su nivel de vida y seguir haciendo pagos de las cosas que ya tienen.
¿Cómo Salir de esta Situación?
Si te has encontrado a ti mismo en esta situación, te darás cuenta de que no puedes cambiar esta situación rápidamente. Tendrás que vivir con ello mientras vas realizando pequeños cambios en tus hábitos de vida o encuentras otro trabajo.
Una vez dicho esto, salir de esta “carrera de la rata” es uno de los objetivos más importantes que debes tener. Si tu objetivo es trabajar frenéticamente durante unos cuantos años y ahorrar e invertir lo máximo posible para así poder disfrutar de un trabajo más simple, con menos responsabilidades, más tiempo libre y menos salario en el futuro, es un objetivo tan válido como otro cualquiera.
Sin embargo, si estás actualmente “encerrado” en tu trabajo, te va a llegar algo de esfuerzo llegar a ese punto.
Un gran primer paso es pagar todas tus deudas. Las deudas son el mayor factor por la que la mayoría de la gente está atrapada en su trabajo.
Los gastos fijos de cada mes, junto con el pago de préstamos personales, créditos para comprar un coche, la hipoteca, los pagos de la tarjeta de crédito y así sucesivamente. Estas deudas pueden ser perfectamente eliminadas con el enfoque y compromiso adecuados.
El método de la bola de nieve funciona muy bien para esto. En esencia, toma el 10% de tus ingresos y aplícalos directamente al pago de deudas.
Haz el pago mínimo en cada deuda que tengas y, a continuación, aplica el resto del dinero a la deuda con la cantidad más pequeña. Cuando acabes con esa deuda, pasa a la siguiente y así sucesivamente, cada añadiendo más dinero a “la bola de nieve” mientras mantienes los pagos mínimos al resto de deudas.
Una vez que hayas acabado con tus deudas, sobre todo las deudas con altos tipos de interés, centra esa “bola de nieve” en inversiones que te hagan ganar un ingreso estable.
Estás buscando una inversión que va a ser capaz de sostenerte económicamente una vez dejes tu trabajo y encuentres uno que te guste.
Dependiendo de tu nivel de vida puede que te valga con los intereses mensuales de una cuenta de ahorros o de un depósito a plazo fijo. O tal vez necesites invertir en bolsa buscando empresas que repartan un buen dividendo, estable y creciente.
Lo que estás buscando ahora es el punto de cruce. El punto en el tiempo en el que tus inversiones y tus nuevos ingresos de trabajo puedan sostenerte económicamente.
Cuando estés allí, o muy cerca, deja tu trabajo y disfruta de la libertad.
Conclusión
Esto suena como un largo camino por recorrer, lo sé. Pero está tan lejos como tu elijas empezar. En lugar de salir a cenar todas las noches gastando dinero en ocio para aliviar el dolor, aprietate el cinturón y comienza a dirigir tu dinero al pago de tus deudas y a ver como desaparecen.
A medida que las deudas se hacen más pequeñas y ahorras e inviertes el dinero te encuentras alcanzando la libertad financiera.
¿Y tú ya has comenzado a salir de la “carrera de la rata“?