13 Formas en que los Supermercados te Manipulan para que Gastes Más

13 Formas en que los Supermercados te Manipulan para que Gastes Más

Consejos para ahorrar

Seguro que te ha pasado unas cuantas veces. Vas a una tienda o supermercado a comprar un par de cosas y entonces cuando vuelves a la caja a pagar, sin darte cuenta, llevas más cosas de las que inicialmente ibas a comprar.

Esto sucede una y otra vez debido a que los supermercados utilizan una variedad de técnicas para hacer que compres más artículos. Por sí mismas, cada técnica no es especialmente fuerte. Es el uso combinado de todas ellas lo que las hace fuertes.

Trucos que Hacen que Compres de más

Los carros de la compra

Muchas veces solo entras al supermercado para comprar uno o dos artículos pero los carros de la compra están justo ahí, en la entrada. Y entonces piensas “¿No estaría mal coger uno y así ir más cómodo mientras pongo las cosas en él?”.

El carro tiene un tamaño enorme en comparación con el de la mayoría de los artículos en venta. Es psicológicamente muy fácil de poner dentro del carro cualquier elemento que no sea necesario.

Los artículos más comunes están al fondo del supermercado

Los artículos más usuales que vas a comprar en un supermercado se encuentran a muchos pasillos de la entrada.

Esto significa que gastas tiempo caminando por una gran cantidad de artículos de consumo mientras buscas el artículo que realmente quieres.

De esta forma, hay muchas posibilidades de que acabes comprando algo que reamente no tenías pensado comprar.

Los artículos más proclives a comprarlos por impulso están cerca de las cajas

Artículos como pilas o chocolatinas y golosinas, siempre están cerca de las cajas. Cuando estás en la cola esperando para pagar ves estos artículos y es el momento perfecto para que caigas y compres alguno de estos artículos.

Los artículos más caros están a la altura de los ojos

Si te fijas en la disposición de las diferentes opciones para un producto en particular, por ejemplo, un detergente para la ropa, verás que casi siempre las opciones más caras se ponen a la altura de los ojos, de modo que es lo que ves primero tan pronto como entras en el pasillo. Las mejores ofertas suelen estar en los estantes inferiores.

Los productos que NO están en oferta se colocan como si lo estuvieran

Es normal encontrar un grupo separado de artículos formando una torre y en la parte superior, indicado en grande, su precio pero nunca que es una oferta. Luego si buscas el artículo por los pasillos verás que está al mismo precio o que el precio es el mismo que el de la semana pasada.

De esta forma, al pensar que es un precio especial y estar en oferta lo compras y hasta puede que en más cantidad.

Artículos básicos siempre están rodeados de elementos no básicos

Los calcetines siempre estarán rodeados de pantalones y camisas. Si tu mente está abierta a la idea de comprar ropa, es más probable que mires otras prendas de vestir.

Para, para, para

Solo pones artículos en el carro si te paras, ¿verdad? Así que las tiendas están diseñadas para maximizar el número de paradas que tienes que hacer. Pasillos donde solo caben dos carros, diseños coloridos y atractivos, escaleras mecánicas y mi favorito de todos, los vendedores de muestras.

Incluso si no eres consciente, cada vez que te detienes en una tienda aumentan las posibilidades de poner algo en tu carro.

Dentro de un mismo pasillo, los artículos básicos están en los extremos

Si entras en un pasillo para conseguir un artículo básico, es decir, un artículo que compra mucha gente, tienes que ir hasta el otro extremo para comprar los otros artículos básicos, de esta forma, pasas por todo el pasillo y ves los artículos más caros.

Eso da a los artículos caros más posibilidades de que acaben cayendo en tu carro de la compra.

Los precios se eligen para hacer difícil la comparación

En vez de vender el detergente de un litro a 6 euros y el detergente de 2 litros a 11 euros, por lo que es más fácil averiguar cuál es mejor compra, venden el de 1 litro a 5,99 euros y el de 2 litros a 10,89 euros. “¡Hey!, mira, son básicamente lo mismo, 10 es la mitad de 5”. Ni siquiera se acercan a la mitad.

Lo que ves en un contenedor no es siempre un buen negocio

Esos contenedores llenos de juegos de ordenador o consola, DVD de películas o de música. Al verlos así lo normal es sean artículo a un mejor precio pero eso no siempre es así. Siempre hay algún artículo más llamativo y este tiene un precio igual que si no estuviera en el contenedor. Pero al encontrarse ahí te da la sensación de que es una buena oferta y lo compras.

Artículos de gama alta se colocan para que parezcan más llamativos

Si ves algo en una vitrina de vidrio que tiene un montón de espacio a su alrededor, tu reacción instintiva es creer que es algo valioso y que aumentará tu prestigio tenerlo en propiedad. Y para muchas personas esto puede ser tan atractivo como una luz para una polilla.

La realidad es que estos artículos tienen un enorme margen de beneficios y están ligados más a la compra de una idea, que no la de un producto.

Las secciones más rentables son las que te encuentras primero

Secciones como las de cosmética o las de entretenimiento y ocio no suelen estar lejos de la entrada ya que son secciones con márgenes de beneficio muy altos y al verlos nada más llegar y luego al pagar es más fácil que compres algo de estas secciones.

Los baños están en la salida o lo más cerca posible

Si tienes que ir al baño en medio de tus compras tienes que volver a recorrer una gran cantidad de artículos para llegar hasta el servicio, lo que aumenta las posibilidades de que realices alguna compra impulsiva.

Cómo puedes ver, ir a comprar en un supermercado es una prueba constante para controlar tus compras por impulso.

En el artículo de mañana veremos trucos para evitar este tipo de compras y que no gastes de más a la hora de comprar.

Si te ha parecido interesante el artículo, por favor compártelo en tu red social favorita.